Menorca: Naturaleza, historia y relax
 

Menorca es una isla que ofrece experiencias para todos los gustos, combinando naturaleza virgen, historia y descanso.

Sus playas y calas se encuentran entre las más bellas del Mediterráneo: desde Cala Macarella hasta Cala Mitjana, y desde Cala en Turqueta hasta Son Bou, todas con aguas cristalinas y arena dorada.
 

Los amantes del mar pueden disfrutar de snorkel, kayak, paddle surf o deportes acuáticos como vela, windsurf o moto acuática, explorando bahías escondidas y fondos marinos llenos de vida.
 

Los aficionados a la naturaleza pueden recorrer el famoso Camí de Cavalls, el antiguo sendero costero que rodea la isla, o explorar el Parc Natural de s’Albufera des Grau, ideal para paseos y observación de aves.
 

Las colinas, los campos y los pequeños bosques ofrecen panoramas espectaculares, y no faltan los faros históricos, como el Faro de Favàritx o el Faro de Cavalleria, perfectos para disfrutar de puestas de sol inolvidables.
 

La historia y la cultura de Menorca se perciben en sus pintorescos pueblos, como Ciutadella, Mahón y Binibeca, donde las calles empedradas y las acogedoras plazas cuentan siglos de tradiciones.

La isla también conserva sitios arqueológicos únicos, como la Torre d’en Galmés o la Naveta des Tudons, testimonios de la civilización talayótica que habitó Menorca hace miles de años.

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Para los más activos, la isla ofrece rutas a caballo o en bicicleta, inmersiones submarinas en fondos espectaculares y campos de golf rodeados de vegetación.